La nueva & afamada chica Disney que protagoniza una tira adolescente sacó segundo disco. Ahora que viene a la Argentina, le presenta al Sí! su cuento de hadas.
Con actuar en una serie no le alcanzó, en películas tampoco, ni con formar parte de una banda o liderar la propia. Selena Gómez, chica Disney por contrato y apariencia, a sus dieciocho años acaba de sacar el segundo disco con su banda, Selena Gómez and the Scene, llamado A Year Without Rain. Pero aunque esté muy ocupada con la promoción del álbum y las presentaciones en vivo -el 4 de febrero tocará en Buenos Aires en el estadio de GEBA-, Selena tiene la cabeza en la actuación.
Comenzó en el programa de Barney y sus amigos a los nueve años, para luego ser descubierta por la compañía del ratón Mickey y tener pequeños papeles en series y películas. En el 2007 pegó el salto a la fama y se convirtió en una de las protagonistas de la serie Wizards of Waverly Place, que ya va por su cuarta temporada, en donde interpreta a Alex Russo, una maga adolescente.
“La verdad es que no sé si quiero ser cantante o actriz aún. Me gustan las dos cosas pero todavía no creo haber decidido cuál camino es el más indicado para mí”, dice Selena y aclara sorprendentemente que se considera mejor en la actuación.
–¿Por qué dijiste que sos mejor actuando? ¿Qué preferís, cantar o actuar?
–Las dos actividades tienen puntos en común. Cuando canto me pongo en un personaje de alguna manera, una está interpretando una canción que involucra sentimientos y una puesta en el escenario. Pero en la actuación es mucho más amplio y más enriquecedor. El desafío es más fuerte, involucra enfrentar distintas emociones, ser una persona diferente y transmitir sentimientos con más convicción. Si fallas en transmitir sentimientos, fallas en la actuación. Actuar es un reto constante.
–¿Cuáles son las diferencias más importantes que notás entre tu nuevo álbum y el anterior “Kiss And Tell” (2009)?
–El primero fue hecho cuando yo era mucho más joven (!) y estaba tratando de descifrar quién era, qué tipo de música quería hacer, cómo iba a ser mi estilo en el escenario. No sabía mucho, en realidad, no tenía idea de ninguna de estas cosas. En este álbum tengo un mejor entendimiento de lo que quiero hacer, dónde, cómo y cuándo. Estoy muy orgullosa de él, y me encantaría que la gente vea lo que aprendí y lo que crecí con este nuevo disco.
El maravilloso mundo de Disney la entrenó bien: del otro lado del teléfono se le puede escuchar la sonrisa a miles de kilómetros y no hay nada negativo en sus respuestas. Todo es fantástico y, por sobre todo, no siente la presión de ser un ejemplo para las adolescentes de todo el mundo. “No siento como si tuviera que comportarme de determinada manera para ser un modelo para las chicas de mi edad, creo que todo lo que hago y mis acciones son cien por ciento naturales”. Dice también que no cree que sus fanáticas la imiten en todo lo que hace y que no quiere condicionar a nadie a ser de una manera definida. “Más que ser un ejemplo para las jovenes, yo soy el reflejo de la cultura de ellas”, cuenta. Con Miley Cyrus no hay competencia dice... aunque Miley subió un video a Youtube burlándose de uno casero que había hecho Selena. ¿Terminará Gómez siendo una “disney revoltosa” más?
Cuando se le pregunta por los momentos más duros y lo más divertidos en su carrera, ella no tiene demasiadas certezas. “Pienso que todos los instantes son divertidos, es un placer para mí ser parte de esta familia y aprender. Y los momentos más duros son...todos los días. Siempre hay algo nuevo con lo que la gente te carga, constantemente uno se siente en un reto, pero son necesarios para seguir superándose y aprender.” Hasta ahora, el cuento de hadas se sigue leyendo.
